jueves, diciembre 09, 2004

Cuando nacieron mis hijos y aún seguían ingresados vino mi amiga Lele, residente en Palma, a verme y por supuesto a conocer a los peques. Después de tres días cuando ya se iba me dio una carta de varios folios en el que había anotado todas las cosas que habíamos hecho juntas esos días y me decía que ella se iba completamente agotada y que tardaría mil días y mil noches en recuperarse y que sin embargo yo no mostraba signos de agotamiento. La carta terminaba diciendo ?¿Me dirás cual es tu secreto??.

Ahora tiene una pequeña, a la que por circunstancias, imperdonables por mi parte, todavía no conozco. Nunca le contesté a la pregunta pero sé qué lo ha averiguado.

Lo piensa y lo dice (puedes no estar de acuerdo)Toña a las 7:14 p. m. y dicen por allí